Un "lolo" local, probando un 8b.
Como todo lo bueno tiene un final (y lo malo también eh?), las vacaciones van tocando a su fin, después de un día de turismo y transición entre Valle y Oslo, llegamos a la capi. Tenemos una guía de escalada deportiva en los alrededores de Oslo y que compramos nada más llegar y estamos dispuestos a amortizarla un poquito así que elegimos una escuela y a por ella. En cuestión se llama Lokenhavna, y está en las afueras de Oslo. La verdad es que después de una primera impresión un poco negativa, ya que la escuela desde la carretera parece una escombrera, vamos afilando los dientes.
Las vías son de una roca rara pero desploman y tienen pasos y movimientos muy atléticos, vamos como en Rodellar. La verdad es que nos lo pasamos en grande, además empieza a llover pero como la pared desploma, s epuede escalar tranquilamente. Tomamos contacto con unos locales que nos explican muchas de esas cosas que conviene saber cuando llegas a un pais y no cuando te vas, pero bueno ya estamos informados para otra ocasión. Eso sí nos mandan a una zona de la ciudad para que salgamos un poco de juerga y allí aciertan de pleno con su recomendación.
Bueno poco más tenmos que deciros, sólo que os animeis a visitar Noruega y no solo en invierno ya que como veis,en verano,el pais puede dar mucho mucho juego.
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